El equipo de "Parásitos", tras recibir sus cuatro Oscar
El pasado viernes llegaba Parásitos a una nueva ventana de exhibición, la plataforma Movistar+. Venía incluso acompañada por un breve documental, Fenómeno ‘Parásitos’, que resumía hasta qué punto la trayectoria de
la película de Bong Joon-ho ha significado algo realmente excepcional en la
historia del cine. Porque nunca un mismo film había cosechado tan alta cantidad
de galardones en festivales y ceremonias anuales, comenzando por la Palma de
Oro de Cannes y terminando por cuatro Oscar, entre ellos el de Mejor Película, algo
inédito con un film no hablado en inglés.
Y cabe recordar, al haber pasado un año desde que se
proyectase en Cannes, que si bien Parásitos
fue bien acogida, ese día, el 22 de mayo de 2019, la máxima atención en el
certamen la concitó Érase una vez… en
Hollywood, el film de Tarantino al que aguardaban masas de público,
profesionales y periodistas, esas masas que, ay!, este año no han podido reunirse
en La Croisette. Fue, por tanto, gracias a la acertada decisión del Jurado
Internacional presidido por Alejandro González Iñárritu, y en el que figuraban
otros cineastas de la relevancia de Pawel Pawlikowski y Yorgos Lanthimos, por
lo que Parásitos encontró su rampa
de lanzamiento mundial.
Que se traduciría, aparte de esos múltiples premios, en una
trayectoria comercial impresionante, como revelan los más de 230 millones de
euros logrados en su paso por las salas de exhibición. De ellos, 7.730.000 euros
a lo largo de veinte semanas corresponden a España, dinero dejado en la
taquilla por 1.270.000 espectadores, que se multiplicaron a raíz de los Oscar,
a partir de los cuales se duplicó con creces la cantidad de público y de
recaudación, lo que indica la influencia económica de este galardón. Incluso
cuando llegó el estado de alarma, Parásitos
ocupaba todavía el quinto puesto del “box office”, al obtener 482.000 euros por
75.000 entradas en una semana. Todo un triunfo para la distribuidora española
La Aventura Audiovisual, siempre dinámica y audaz, que ya había apostado por
Bong Joon-ho en varios de sus títulos previos. Lo mismo que debe destacarse que
la 59 Semana de Valladolid tuvo el precursor criterio, en 2014, de dedicar una
retrospectiva al cineasta coreano, que contó con su presencia personal.
Portada del libro dedicado a Bong Joon-ho en el Festival de Valladolid de 2014
Muy difícilmente volverá a producirse un fenómeno similar, cuya
dimensión me figuro que se verá confirmada en el trayecto digital que ahora se
ha iniciado. Desde luego no este malhadado año, con las salas cerradas durante
meses. Esperemos que, como se prevé, el 26 de junio, o el siguiente viernes 3
de julio, se iluminen de nuevo las pantallas, aunque con la mitad del aforo y
fuertes medidas sanitarias. No podemos faltar a esa cita.
(Publicado en "Turia" de Valencia, mayo de 2020).
No hay comentarios:
Publicar un comentario