Un tema eterno, el de la enseñanza del cine en España, al que
las diversas Administraciones –sean del color político que sean– no han querido
ni sabido resolver. Los motivos que siempre se han esgrimido son de lo más
variado: excesivas materias curriculares, falta de profesores preparados y
carencia de medios económicos y personales para impartirla, imposibilidad de
una acción global desde el Ministerio de Educación porque la mayoría de las
competencias educativas están transferidas a las Comunidades Autónomas… Y así
seguimos, sin que ni el cine ni el audiovisual en su conjunto aparezcan como
tales en ninguno de los niveles de la enseñanza. Hay, sí, numerosas iniciativas
en escuelas, institutos o colegios, sobre todo en Cataluña, Aragón, Galicia y
Andalucía. Pero son casos aislados, plenos de buena voluntad y muy valiosos,
pero que no modifican la situación en su conjunto. Al contrario de lo que
sucede en diversos países de nuestro entorno europeo, sobre todo Francia (donde
llevan décadas practicando una decidida política en este sentido), pero también
Gran Bretaña, Finlandia o Dinamarca.
Juan Antonio Pérez Millán
Viene a sumarse a la cuestión, a esta necesidad y exigencia,
el libro que acaba de publicar Juan Antonio Pérez Millán en Ediciones Morata: “Cine, enseñanza y enseñanza del cine”.
Y más allá de su oportunidad, de su inserción en un debate que a todos afecta,
las solo 128 páginas del texto, escritas en un estilo muy claro y legible, son
capaces de aportar un enfoque original y nada ortodoxo ni convencional sobre el
tema. Pérez Millán (que fue director de Filmoteca Española y, durante más de
veinte años, de la de Castilla y León, en Salamanca, labor por la que acaba de
ser distinguido con la Medalla de Oro de la ciudad, además de ser profesor en
la Facultad de Bellas Artes) fija especialmente su atención en la necesidad del
aprendizaje, conocimiento y “descodificación” del lenguaje audiovisual. Frente
a la simple utilización del cine como pretexto para discernir sus contenidos o
como vehículo para facilitar el abordaje a otras disciplinas, su libro propone
que sea ese conocimiento en profundidad del lenguaje el que nos haga, y
especialmente a niños y jóvenes, realmente “libres” en un terreno que ocupa
buena parte de nuestra vida cotidiana.
Tras un recorrido por la evolución del hecho cinematográfico,
Pérez Millán se adentra enseguida en los “rudimentos
y códigos de un lenguaje”, para llegar –por pura lógica– a “un método para el análisis crítico”,
que destaca por su sencillez y su carácter pedagógico. La parte final es la más
polémica y combativa, cuando el autor aborda las “dificultades” con que choca en España la alfabetización
audiovisual y una serie de consideraciones sobre el propio cine, la televisión
y la publicidad, concluyendo con que nos hallamos ante “una situación de emergencia”… Un libro altamente recomendable.
(Publicado en "Turia" de Valencia, junio de 2014).
No hay comentarios:
Publicar un comentario